Seis centros de hemodiálisis fueron clausurados en el país, de acuerdo con las acciones de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), ante la falta de registros o licencias sanitarias.
El Dr. Hebert Flores Leal, comisionado de la COEPRIS Michoacán, indicó las causas de la clausura de los establecimientos a nivel nacional, de los cuales dos pertenecen a la entidad michoacana. “El hecho de que haya una clínica o espacio que oferte servicios de salud sin licencias sanitarias es muy peligroso, lo cual no da certeza a las personas de que se posean los equipos adecuados o el personal calificado para atender la salud de la gente”, indicó el doctor.
Flores Leal aseguró también que los centros de hemodiálisis en México necesitan una licencia sanitaria que ampara todos los servicios que utiliza. “Junto con el órgano federal hacemos estrategias para ayudar por medio de orientaciones gratuitas, con expertos. Aquellos que no atiendan o se rehúsen a seguir la norma sanitaria, deben ser suspendidos”, finalizó Hebert.
Michoacán posee dos clínicas irregulares. El resto está dividido por el territorio nacional: dos están en la CDMX, dos en el Estado de México y uno en Tamaulipas.