El filme narra cómo un encuentro que inicialmente buscaba ser una carrera de autos con un pequeño concierto terminó convirtiéndose en el festival de rock más grande del país

Ashley Rodríguez / La Voz de Michoacán

México. - La efervescencia juvenil, la música rebelde de los setenta y el caos detrás del mítico Festival de Avándaro de 1971 llegan al cine con la película “Autos, Mota y Rocanrol”, dirigida por José Manuel Cravioto y protagonizada por Emiliano Zurita y Alejandro Speitzer. El largometraje se estrenará en todas las salas del país el próximo 11 de septiembre, bajo el sello de Cinépolis Distribución, fecha que coincide con el 54 aniversario del histórico festival.

La cinta ofrece una mezcla de comedia y mirada crítica sobre el llamado Woodstock mexicano, un evento que marcó a toda una generación y cambió para siempre la historia musical de México. El filme narra cómo un encuentro que inicialmente buscaba ser una carrera de autos con un pequeño concierto terminó convirtiéndose en el festival de rock más grande del país.

En entrevista exclusiva para La Voz de Michoacán, Emiliano Zurita y Alejandro Speitzer nos platicaron acerca de “Autos, Mota y Rocanrol”, un proyecto que fue parte de la Selección Oficial del Festival Internacional de Cine de Guadalajara 2025, donde Zurita obtuvo el premio a Mejor Interpretación por su papel de Justino, uno de los organizadores del festival.

Una propuesta distinta

Sobre cómo llegaron al proyecto, Emiliano Zurita recordó que desde el inicio lo convenció la propuesta:

“Se me hizo súper interesante, se me hizo una propuesta distinta, y obviamente poco a poco viendo el equipo detrás, creo que como actor te emociona mucho que veas a alguien que tenga tanta creatividad, tanta entrega, que respetes el trabajo que han hecho. De ahí supe que era un proyecto en el que me interesaba involucrarme”.

Por su parte, Alejandro Speitzer destacó la evolución del proyecto hasta consolidarse como un largometraje independiente:

“Lo leí, me gustó mucho. De pronto la película se replanteó porque iba a suceder con una plataforma, después se convirtió en una película independiente y fue increíble ver esa creatividad y la certeza de que esta película iba a suceder sí o sí. (…) Pienso que hacer cine es un acto de fe absoluto y esta película, que es independiente, llega a salas y está teniendo una gran recepción. Estoy muy contento”.

Entre la sátira y la memoria histórica

La película no sólo es un relato cómico, también rinde homenaje a la juventud que en los setenta buscaba libertad en un contexto marcado por la represión política. Emiliano Zurita explicó cómo encontró el equilibrio entre humor y memoria histórica:

“Eso fue 100% confiando en el guion y en la visión de Cravioto. (…) La comedia de esta película nunca dejó atrás que es un homenaje a toda esa gente y a los músicos que se arriesgaron a juntarse por una ideología distinta”.

Mientras tanto, Alejandro Speitzer resaltó que la música fue un vehículo fundamental para sumergirse en el espíritu contracultural de la época:

“Me fascina la música, y lo que escucho poco es actual. (…) Me parece increíble que acá toda la música se regrabó, hay un diseño sonoro y un score increíbles. También se ponen sobre la mesa a bandas que abrieron paso a lo que hoy es el rock mexicano, como Three Souls in My Mind o Los Dug Dug’s”.

Un reconocimiento compartido

Emiliano Zurita valoró el premio recibido en Guadalajara como un logro colectivo:

“Fue algo increíble por todo el contexto. (…) Es muy bonito que reconozcan un trabajo que más que mi interpretación es un reconocimiento al gran trabajo de todo el equipo de la película”.

Ambos actores coincidieron en que uno de los grandes aciertos de Cravioto fue combinar la ficción con la memoria histórica a través de imágenes reales del festival resguardadas por la Filmoteca de la UNAM, así como con el testimonio de Justino Compeán, uno de los organizadores originales del evento. Zurita resaltó que esta aportación dio autenticidad al proyecto, mientras que Speitzer consideró que fue decisiva para conectar al público con la época:

“Creo que es un gran acierto el haber utilizado imágenes reales, hay una combinación muy bien lograda que te sigue sumergiendo en la época. (…) Tener a Justino fue una fortuna, él lo vivió de viva voz porque él estuvo ahí. Esta película no funciona sin la química de estos dos personajes y eso fue un gran aliado; tuvimos la fortuna de poder acompañarnos en el camino”, señaló Speitzer.

Homenaje al rock mexicano

La cinta se distingue por estar filmada en 16mm y Súper 8mm, lo que aporta una estética retro y auténtica, fusionada con valioso material de archivo. Además, rinde homenaje a bandas emblemáticas de la época como Los Dug Dug’s, Peace and Love, El Ritual, Tequila y Three Souls in My Mind, pilares del rock mexicano.

Con un elenco que también incluye a Ianis Guerrero, Juan Pablo de Santiago, Enrique Arrizon y Luis Curiel, así como invitados especiales entre los que destacan Alex Fernández y Fran Hevia, “Autos, Mota y Rocanrol” celebra la música y los ideales de libertad de toda una generación.

El estreno nacional será el 11 de septiembre, cuando la película llegue a todas las salas de cine del país.