Morelia, Michoacán
Amigas de Gaby Molina compartieron qué las hace Mujer Maravilla y cuál es el superpoder que les permite seguir sus sueños e impulsar los de sus familias, promoviendo el respeto a los derechos humanos desde sus ámbitos: en el aula, en la empresa, en la política, en la comunicación, en el consultorio y en la vida cotidiana criando y educando hijos, cuidando adultos mayores.
Convocadas por Circe López Rio Frío, directora de Humanas sin Violencia, y Julieta Mendoza Guzman, de PAR:ES ONG, cada participante reflexionó y compartió su “Poder”; Mireya Aguilar González, secretaria de Mujeres del Comité Ejecutivo Estatal de Morena Michoacán, se reconoció poderosa al saber que puede tomar decisiones y transformar su entorno y el de otras mujeres, y reconoció en Gaby Molina su trabajo y logros al frente del sector educativo en Michoacán.
Por su parte, Alma Griselda Valencia Medina, ex diputada federal, destacó el liderazgo de Gaby Molina, a quien conoció desde el movimiento democrático de 1988, y afirmó que su trayectoria da confianza y resultados. “Estamos en el tiempo de las mujeres, y estamos aquí porque creemos firmemente, con convicción, que ¡ya nos toca!”, expresó.
Graciela Andrade García Peláez, política de la izquierda mexicana, compartió que su poder radica en amar a sus compañeras, no sentir envidia y luchar por un mundo mejor, coincidiendo con Gaby Molina en la importancia de trabajar siempre para superarse; Selene Vázquez Alatorre, política michoacana de izquierda, describió el gran poder que le da ejercer el derecho a expresarse, sobre todo cuando esa voz sirve para ayudar a otras personas y a mejorar el entorno.
Lupita Moreno, del municipio de Epitacio Huerta, dijo sentirse poderosa al ejercer la educación que transforma vidas, como la de sus estudiantes que han obtenido primeros lugares en concursos de robótica en Estados Unidos; en tanto que la comunicadora Gaby Huerta habló del poder de transformación de las mujeres y de cómo es posible reinventarse, a pesar de los desafíos del entorno o las circunstancias personales.
Por su parte, Lesly Zuñiga, mujer feminista, líder de Chicas de la Banda, definió su superpoder como la lucha constante por los derechos humanos, con perspectiva de género y diversidad sexual, acompañando a otras mujeres y abriendo espacios para quienes los necesiten.
Finalmente, Gaby Molina agradeció a las más de mil mujeres reunidas por romper el techo de cristal y el piso pegajoso que impiden avanzar, lograr sueños y cumplir metas.
“Las mujeres tenemos presente y tenemos futuro, pero sobre todo —dijo— nos tenemos unas a otras.”