Un polémico video compartido en redes sociales ha provocado la indignación de los australianos tras ver a la influencer estadounidense Sam Jones capturando a una cría de wombat salvaje en plena noche, en un acto que muchos consideran irresponsable y dañino para la fauna autóctona.
Jones, quien se presenta como “bióloga de vida silvestre y científica ambiental” en sus redes, publicó en su cuenta de Instagram las imágenes en las que aparece corriendo tras el pequeño marsupial, para luego sujetarlo en sus brazos mientras sonríe ante la cámara.
A lo largo del video, la cría de wombat emite ruidos de malestar, mientras que la angustiada madre observa a distancia. Después de algunos minutos, la joven decide liberar al animal.
A pesar de que los wombats no están actualmente en peligro de extinción, la situación desató una oleada de críticas en las redes sociales, principalmente por parte de usuarios australianos que señalaron la conducta inapropiada de la influencer.
La polémica ha escalado a niveles nacionales, con autoridades y defensores de los derechos de los animales pidiendo que se tomen medidas contra Jones, quien ha decidido bloquear su cuenta de Instagram.
La Ley de Protección Ambiental y de Bioseguridad de 1999 en Australia establece que es ilegal dañar o capturar especies silvestres nativas, y las sanciones por infringir esta normativa pueden llegar hasta los 300.000 dólares australianos (aproximadamente 3.8 millones de pesos).
En respuesta a los hechos, usuarios y activistas de la protección animal han instado a las autoridades australianas a que investiguen el incidente y tomen las acciones necesarias.
Yolandi Vermaak, veterinaria rescatista de wombats, expresó su rechazo hacia Jones, acusándola de faltar al respeto a la fauna australiana. “Eres una visitante. Al actuar de esta manera, nos has faltado completamente al respeto como australianos y a nuestra hermosa fauna”, escribió en Instagram.
Por su parte, el usuario worldanimalnews también criticó el incidente, exigiendo que las autoridades actúen con firmeza.
El Gobierno australiano no ha permanecido ajeno a la controversia. Penny Wong, ministra de Exteriores, calificó las imágenes de “horribles” y afirmó que las autoridades de inmigración están evaluando si corresponde tomar medidas, incluida la posible deportación de la influencer.
“Dejen al wombat en paz. Déjalo con su madre”, declaró Wong en una entrevista con el canal Seven Network. Las autoridades australianas se han comprometido a investigar el suceso, mientras que expertos en fauna local instan a un mayor respeto por la vida silvestre de la región.
Fuente: López-Dóriga
