Morelia, Michoacán

“No tengo nada que ocultar, lo que me tengan que recriminar, que me lo recriminen, pero con objetividad, no con temas inventados y mentirosos”, afirmó el arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos.

Luego de señalamientos emitidos por el articulista Claudio Ochoa, en su columna dominical en El Universal, en su conferencia de prensa semanal, Garfias Merlos fue cuestionado sobre la presunta entrega de 30 unidades vehiculares por parte del exgobernador Silvano Aureoles Conejo a la Arquidiócesis de Morelia.

El jerarca católico dijo que “todo lo que se pueda decir sobre una persona, hay que demostrarlo y distinguir lo que es mentira, fantasía o conclusiones de alguna persona. Silvano Aureoles y yo somos amigos, somos cercanos desde antes de que él fuera gobernador de Michoacán y yo, arzobispo de Morelia; lo que le acusen lo deben demostrar y si me quieren involucrar en eso también lo tienen que demostrar, yo no tengo nada que ocultar, lo que me recriminen, que lo hagan, pero con objetividad, no con temas inventados y mentirosos”, expresó.

Insistió con que “si alguna persona tiene algo que decirme, que me lo diga, pero que no recurra a temas mediáticos, porque eso desacredita, además de que crea desconfianza e incertidumbre”.

Cabe recordar que hace una semana se dio a conocer la existencia de una orden de aprehensión en contra de Silvano Aureoles Conejo, así como la detención de cuatro exservidores públicos en activo durante su sexenio, por la presunta comisión de ilícitos vinculados con el manejo inadecuado de recursos públicos.