Guillermo Valencia Reyes, dirigente estatal del PRI lamentó el asesinato del líder limonero Bernardo Bravo, señaló que como legislador local exige se cancele la sesión solemne programada para el 22 de octubre en Apatzingán.
“Se suspenda la sesión solemne que está programada para el próximo 22 de octubre en Apatzingán, a manera de protesta a manera de solidaridad con su familia, pero también porque estamos muy lejos de los preceptos por los que luchó Morelos sean una realidad”
Aseguró que la muerte de Bernardo no es una muerte más y que será difícil de llenar un espacio tan grande que deja en este sector limonero.
“La muerte de Bernardo, es una muerte que vale, no lo digo nada más el número de personas es un hueco imposible de llenar, no se puede meditar o limitar el alcance que tiene la muerte de una actividad social que lucha por tantas personas que le daba voz a tantas personas, no es una muerte más”
lamentó que el alzar la voz te pueda costar la vida en este país, donde no se deja avanzar a los personajes que luchan por la gente.
“Parece que en México ya no se puede protestar, que ya no se puede avanzar la voz, que no se puede actuar, porque te asesinan”
Aseguró que se debe de investigar a fondo esta muerte y blindar a los productores michoacanos.