Durante una entrevista con el periodista Luis Cárdenas, el empresario Simón Levy denunció haber sido víctima de un atentado y califica como falsas las versiones sobre su detención en Portugal, acusando persecución política desde México
Ciudad de México.- En entrevista con el periodista Luis Cárdenas, el empresario Simón Levy aseguró rompió el silencio luego de que la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum difundiera en su mañanera la versión de que había sido detenido en Portugal, confirmando que la información es falsa y denunció haber sido víctima de un atentado horas antes.
Levy explicó que, por razones de seguridad, no puede revelar su ubicación exacta, aunque finalmente reconoció que reside en Washington, Estados Unidos.
“Estoy vivo por fortuna, pero hace pocas horas intentaron matarme”, declaró durante la conversación, donde relató que dos hombres armados abrieron fuego en su contra y logró escapar gracias a un vehículo blindado.
Según su relato, el ataque ocurrió después de recibir amenazas por parte de personas presuntamente vinculadas con el partido Morena. Levy afirmó que lo amenazaron de muerte si continuaba haciendo señalamientos contra el expresidente Andrés Manuel López Obrador y su hijo Andy López Beltran. “No solo me iban a matar a mí, también a mis hijos”, expresó.
El empresario consideró que las versiones sobre su supuesta detención en Portugal son parte de una “cortina de humo” para desacreditarlo. La presidenta Claudia Sheinbaum había declarado que existía una ficha por una denuncia en la Ciudad de México; sin embargo, Levy insistió en que esa investigación se basó en un video editado y manipulado.
También señaló que la Fiscalía de la Ciudad de México reabrió ilegalmente casos previamente cerrados, pese a que un tribunal federal ya lo había reconocido como víctima.
“Interpol negó la orden de captura, pero buscan volver a solicitarla”, denunció.
Visiblemente afectado, Levy dijo a Luis Cárdenas sentirse temeroso por su vida pero determinado a seguir denunciando lo que considera una persecución política. “Están desesperados. Lo que quieren es silenciarme”, concluyó.

